Es necesario, según los expertos, crear políticas que fomenten la integridad de niños y niñas.
Colombia afronta importantes retos en materia de niñez y juventud, enfocados en diferentes frentes como educación, salud y pobreza.
Cifras de Unicef revelan que en Colombia hay aproximadamente 16 millones de niños y adolescentes, y de estos, 1’208.216 hacen parte de la iniciativa ‘De Cero a Siempre’, la cual busca ofrecer atención integral a los menores.
Esa cifra no es minúscula, dice Alejandro Acosta, director de la Fundación Centro Internacional de Educación y Desarrollo Humano, (Cinde), pero reconoce que es necesario lograr mayor cobertura y, sobre todo, dar continuidad a esa política para lograr un impacto realmente significativo.
Acosta, quien estudió economía y sociología y es doctor en educación, aseguró que el nuevo gobierno deberá, por ejemplo, generar cambios en el modelo educativo que permitan incentivar el trabajo colaborativo y así promover la integridad en niños, niñas y jóvenes.
Precisamente, para encontrar soluciones que permitan mejorar las condiciones de vida de los niños y niñas, el Centro de Estudios en Niñez y Juventud del Cinde, junto con la Universidad de Manizales, realizarán en esa ciudad, la tercera versión de la Bienal Latinoamericana y Caribeña de Infancias y Juventudes.
En esta versión se reunirán más de 1.450 ponentes, repartidos entre investigadores, funcionarios públicos, expertos en política pública y organizaciones.
¿Cómo percibe la niñez y la juventud en Colombia?
Se han hecho importantes avances en esta materia en los últimos años. Desde la reformulación del código de infancia y adolescencia, hasta lograr entender que para mejorar la calidad de vida de los niños y niñas es necesario crear políticas públicas. En ese camino, la estrategia de Juan Manuel Santos (De Cero a Siempre) ha impactado de manera positiva, logrando una cobertura de más de 1 millón de niños.
Sin embargo, el gran reto es elevar esa cifra y darle continuidad suficiente para que logre el impacto requerido en todo el territorio nacional. Pero también se necesita que las políticas contribuyan a la formación completa de la vida, si no es así, lo que se logró en la niñez, se perderá.