La iniciativa fue establecida por el Secretario General de las Naciones Unidas a petición de los Estados Miembros y calcula que por cada aportación de 1500 dólares se podrá salvar la vida de una persona y prevenir diez lesiones de gravedad.
Más de un millón de personas mueren cada año en las carreteras de todo el mundo y alrededor de cincuenta millones sufren heridas, en muchos casos de gravedad, según las estimaciones presentados este jueves por la Comisión Económica para Europa.
A esta trágica situación hay que añadirle las pérdidas económicas que los accidentes causan a la sociedad que se calcula ascienden a casi dos billones de dólares.
Pese al clamor mundial que demanda mejoras en la seguridad vial, la financiación de estas actividades sigue lejos de ser la adecuada tanto a nivel local, como nacional o regional.
Acerca del Fondo
En abril de 2016, la Asamblea General en la que se pedía al Secretario General que considerara la posibilidad de establecer, a partir de contribuciones voluntarias, un Fondo Fiduciario para la Seguridad Vial, con el objetivo de llegar a ejecutar el Plan Mundial para el Decenio de Acción para la Seguridad vial 2011-2020 y los objetivos de desarrollo sostenible relacionados con la seguridad vial.
El Fondo prevé apoyar medidas que se ajusten a los cinco pilares del Plan Mundial para el Decenio de Acción para la Seguridad Vial.
• Fortalecimiento de la capacidad de gestión de la seguridad vial
• Mejora de la seguridad de las infraestructuras viarias y de las redes de transporte en general
• Aumento de la seguridad de los vehículos
• Mejora del comportamiento de los usuarios de la carretera
• Mejor cuidado después de un accidente