El Presidente del Consejo Global para la Tolerancia y la Paz participa en el Encuentro Ecuménico de Oración Interreligiosa en el Líbano con la presencia de Su Santidad el Papa

Su Excelencia Ahmed bin Mohammed Al Jarwan, Presidente del Consejo Global para la Tolerancia y la Paz, afirmó que su participación en el Encuentro Ecuménico de Oración Interreligiosa celebrado en el Líbano — con la presencia de Su Santidad el Papa y la participación de líderes religiosos cristianos y musulmanes — responde al firme compromiso del Consejo de promover los valores de la fe compartida, fortalecer la cultura del respeto entre las religiones y trabajar por un mundo más pacífico y estable.

Al Jarwan señaló que la reunión de distintas religiones bajo un mismo techo, en tierra libanesa, transmite un profundo mensaje humano y espiritual, demostrando que la verdadera fe — más allá de la diversidad de caminos y creencias — converge en los principios universales del bien, el amor, la justicia y la dignidad humana.

Subrayó que el Líbano, con su histórico modelo de pluralismo religioso y cultural, continúa demostrando que la fuerza de las sociedades reside en su capacidad de convivir, respetar las diferencias y preservar este patrimonio civilizatorio único.

Al Jarwan agregó que el mundo necesita hoy más que nunca iniciativas de diálogo y construcción de puentes, destacando que la paz no se recibe, sino que se construye; y comienza en corazones que reconocen el valor del ser humano, consolidándose cuando las religiones se unen sobre una base moral común.

Asimismo, elogió el importante papel que desempeña Su Santidad el Papa en la promoción de la cultura de paz, la defensa de la dignidad humana y el acercamiento entre pueblos y religiones. También destacó los esfuerzos de las instituciones religiosas en el Líbano para fortalecer la unidad y la solidaridad en las difíciles circunstancias actuales.

Al Jarwan reafirmó que el Consejo Global para la Tolerancia y la Paz sitúa en el centro de su misión la promoción de la convivencia, la transformación de los principios de tolerancia en prácticas cotidianas y la creación de plataformas de diálogo constructivo entre seguidores de diferentes religiones y culturas. La participación en este encuentro, señaló, es una prolongación natural de dicho compromiso.

Para concluir, expresó su esperanza de que este encuentro espiritual sea un puente de amor y unidad, que lleve paz y bienestar a todo el Líbano, y que guíe a todos hacia lo que beneficia a la humanidad y refuerza su estabilidad.